Scratch vs. mBlock: ¿cuándo usar uno u otro?
En el mundo de la robótica educativa y la programación para niños, Scratch y mBlock son dos herramientas fundamentales. Ambas permiten iniciarse en la programación por bloques, desarrollar el pensamiento lógico y crear proyectos interactivos de forma visual y amigable. Sin embargo, aunque comparten muchas similitudes, están diseñadas para objetivos distintos y conviene saber cuándo es más apropiado utilizar una u otra.
Nota: Este artículo se centra en las últimas versiones de Scratch (3.0) y mBlock (5.x), que son las versiones activamente mantenidas y recomendadas para nuevos proyectos.
Este artículo está pensado para docentes, madres y padres que quieren introducir a sus hijos o estudiantes en el mundo de la programación y la robótica, y no saben por dónde empezar. Aquí te ayudo a entender las diferencias clave y los contextos más adecuados para cada plataforma.
Comparativa técnica
Comparativa técnica
| Característica | Scratch | mBlock |
|---|---|---|
| Desarrollador | MIT Media Lab | Makeblock |
| Lenguaje base | Lenguaje original de programación por bloques | Basado en Scratch 3.0, con bloques y funciones extendidas |
| Interfaz | Muy visual, colorida y pensada para niños | Similar a Scratch, pero con más opciones técnicas |
| Plataforma | Web, Windows, Mac | Web, Windows, Mac |
| Compatibilidad con hardware | Sí: LEGO WeDo 2.0, Makey Makey (emulación de teclado) | Sí: mBot, Arduino, Micro:bit, CyberPi, etc. |
| Programación avanzada | Limitada a lo visual | Incluye Python y C++ en proyectos más avanzados |
| Edad recomendada | Desde 6 años | Desde 8-9 años si se usa con robótica |
| Idiomas disponibles | Multilingüe | Multilingüe |
| Instalación | No necesaria (puede usarse online) | Requiere instalación para usar con robots físicos |
¿Cuándo usar Scratch?
Scratch 3.0 es ideal para los primeros pasos en programación. Se recomienda para:
- Educación Primaria (desde 1.º a 6.º curso).
- Trabajar proyectos creativos, como historias interactivas, juegos o animaciones.
- Enseñar lógica de programación sin necesidad de hardware adicional.
- Introducir conceptos como eventos, condicionales, bucles o variables de forma sencilla.
- Clases que fomentan la creatividad, la expresión artística y la narración digital.
- Experiencias iniciales con Makey Makey o LEGO WeDo 2.0 (requiere conectividad compatible).
Su facilidad de uso, entorno visual amigable y acceso directo desde el navegador lo convierten en una opción excelente para aulas con recursos variados y para empezar en casa sin complicaciones técnicas.
¿Cuándo usar mBlock?
mBlock 5 amplía las posibilidades de Scratch, especialmente cuando se busca trabajar con hardware y robótica real.
Se recomienda para:
- Alumnos de últimos cursos de Primaria y Secundaria.
- Proyectos de robótica educativa con placas como mBot, Arduino, Micro:bit o CyberPi.
- Actividades donde se combina la programación con sensores, motores, luces, pantallas y componentes físicos.
- Transición natural a Python o C++ desde la programación por bloques.
- Centros educativos o talleres con enfoque STEAM que buscan desarrollar proyectos más técnicos o tecnológicos.
mBlock permite además ver y editar el código real detrás de los bloques, lo cual es muy útil en entornos de aprendizaje progresivo o para quienes desean dar un salto hacia la programación textual.
Conclusión
Scratch y mBlock no compiten, se complementan. Cada uno tiene su momento ideal:
- Para introducir a los más pequeños en el mundo de la programación, Scratch 3.0 es la mejor opción: intuitivo, creativo y completamente visual.
- Para quienes ya dominan los conceptos básicos y quieren adentrarse en la robótica educativa con componentes reales, mBlock 5 abre todo un mundo de posibilidades.
Ambas plataformas son gratuitas, potentes y están en constante evolución. Lo más importante es acompañar el aprendizaje con proyectos motivadores y adecuados a la edad y nivel del alumnado.
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